P.54: Solo en los ojos ¡Solo en los ojos! Solo en los ojos y en la mirada, ya con mi casa deshabitada, siento mi alma enmaridada a todas las ánimas en la armonía ya devanada del Dios que me llama. Comparte: Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva) Correo electrónico Haz clic para compartir en X (Se abre en una ventana nueva) X Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva) Facebook Me gusta Cargando...
El fondo es un maravilloso cuadro de Paul Klee.
La imagen tan inspiradora es de Catrin Welz-Stein.