I
La no muerte es el aliento para atravesar tus miedos
es la que te azuza con su fuego
de fortaleza, de alegría, de esperanza y de fe.
Da igual el tiempo que hayas compartido con ella,
pues es tal su poder irradiante
que solo un instante viviendo con la no muerte,
te prende y mientras vivas te renueva.
Ya eres ella, el misterio de vivir en la plenitud de su presencia eterna.
No hay vuelta atrás.
II
Una vez que te encuentras con la no muerte
no podrás separarte de ella
porque ya está en ti la huella de su inocencia
la fuerza en tu interior que te irradiará
mostrándote en cada momento la belleza de lo cotidiano
guiándote por el sendero que dará sentido a tu existencia.